Veracruz | 2022-09-02
Sólo un madero perdura de lo que habría sido la antigua Ciudad de Tablas en Veracruz, y está dentro de la Catedral, dentro de una caja de cristal.
Difícilmente habrían llegado hasta nuestros días más vestigios de esa población que a falta de material pétreo para edificar viviendas recurrió a los árboles para improvisar cuarteles militares, dormitorios y viviendas a partir del siglo 17 en una planicie con abundante arena, pero no piedras.
El presidente de la Fundación de la Crónica de Veracruz, Miguel Salvador Rodríguez Azueta, explicó que la madera era fácil de incendiar por los tantos invasores que merodeaban por tierra y por mar, y por eso la Ciudad de Tablas se convirtió en buena medida en cenizas.
Según Rodríguez Azueta, hace tiempo el párroco Víctor Manuel Díaz Mendoza lo colocó en ese sitio.
FG