Largas filas en catedral para despedir a Hipólito Reyes, obispo de Xalapa

Xalapa | 2021-08-09 | Leticia Cruz

En la Catedral Metropolitana de Xalapa descansan ya los restos del arzobispo Hipólito Reyes Larios, quien falleció este domingo 8 de agosto en la capital veracruzana, a causa de una hemorragia interna, como fue informado de manera oficial por la arquidiócesis.

Comunidad religiosa, monjas y sacerdotes, así como fieles católicos, se dieron cita en la misa de cuerpo presente en la Catedral de Xalapa.

Junto al ataúd, un enorme cirio pascual y la foto de Monseñor; su familia le acompañó para despedirlo y depositar sus restos en la tumba, ubicada próxima a donde descansa el cuerpo de San Rafael Guízar y Valencia.

En la ceremonia de exequias, el obispo auxiliar de Xalapa, Rafael Palma Capetillo, dirigió unas palabras al arzobispo Reyes Larios, recordando su labor religiosa.

"Adiós mi querido hermano Hipólito, Cristo el buen pastor te lleva sobre sus hombros al reino eterno (...)Te vas pronto, sin avisarnos, sin despedirte de nosotros (...) Nos has dejado huérfanos mi querido padre y pastor, nos sentimos como ovejas sin guía (...) Quien muere en Cristo resucitará con él".

Ante la muerte, expresó, debemos estar preparados, "porque no sabemos ni el día ni la hora, pero nos has dejado la grande lección, que debemos estar siempre disponibles ante la voluntad del señor, en todo momento, hasta que él nos llame".

El arzobispo Hipólito Reyes Larios, nacido el 13 de agosto de 1946 en Camerino Z. Mendoza, falleció a escasos días de cumplir 75 años, edad en la que podría retirarse de su mandato religioso.

FIELES HACEN FILA PARA DAR ÚLTIMO ADIÓS

Tras la noticia del fallecimiento del arzobispo, la comunidad católica-cristiana comenzó a manifestar sus condolencias. Este lunes, a pesar de la pandemia, los fieles hicieron fila para poder entrar unos minutos a la Catedral Metropolitana y dedicar una oración o persignarse en la misa de cuerpo presente de monseñor Hipólito.

Para ingresar, los asistentes, incluyendo la prensa, tuvieron que pasar por un tapete con cloro, fueron rociados con desinfectante, se les tomó la temperatura y se aplicó gel antibacterial. Sin embargo el interior la Catedral estaba saturada, ya que fue mucha la comunidad religiosa y creyente la que acudió a despedir al arzobispo Reyes Larios.