Veracruz | 2022-11-01
Con Amor eterno y Un puño de tierra, entre otras canciones, es como María Luisa Cruz Martínez recordó a su mamá de crianza la señora Eleuteria Contreras Hernández.
Como último deseo le pidió ser sacada de su casa con música. Lo cual replica cada vez que visita su tumba.
Este 1 de noviembre, María Luisa Cruz Martínez visitó temprano la tumba de su abuela materna a quien llama mamá, ya que fue quien la crio.
"Es mi mamá, bueno es mi abuela, pero es la que me crio. Acaba de cumplir un año que falleció", compartió con una mirada vidriosa al recordarla tras la interpretación de un dueto de músicos que cantaron las canciones favoritas de doña Eleuteria.
Visitar la tumba de quien consideró y sigue viendo como una madre, cada vez que viene a la ciudad, es un placer.
Doña Eleuteria Contreras Hernández fue una conocida partera tradicional, quien atendía en su casa de la colonia Venustiano Carranza, en Boca del Río, a mujeres que buscaban su ayuda para dar a luz, pero también para "acomodar" al bebé, las que se les dificultaba quedar embarazadas también acudían con ella.
Su nieta, María Luisa, comparte que doña Eleuteria fue una partera certificada, pues acudió a cursos de capacitación impartidos en hospitales de la Secretaría de Salud de Veracruz.
"Ella era originaria de Minatitlán, ahí ella empezó, vino aquí a Veracruz y fue que inició con mi abuelo a traer niños al mundo, de ahí se empezó a capacitar en el hospital regional y en el hospital de Tarimoya. Fue partera certificada, tenía sus cursos, cada mes iba".
Doña Eleuteria falleció a los 65 años por complicaciones por la diabetes, sin embargo, pese a su edad aún atendía a mujeres que confiaban en su trabajo como partera tradicional.
A lo largo de su vida ayudó a recibir a más de 200 bebés, pues este oficio lo inició a los 16 años, todos nacieron vivos y sin complicaciones, incluso hasta unas gemelas recibió.
"Desde que yo tengo uso de razón, porque yo igual nací ahí, ahí nacieron mis hijos igual; le calculo como unos 200, 300 o más. Trajo muchos niños al mundo".
-¿A qué edad inició como partera?
- "Ella me platicó que inició como a los 15, 16 años; ella me platicaba mucho, empezó poniendo a los niños a los pies de la Virgen, es cuando un niño está enfermo, ella le talla una veladora y le pide a la Virgen que lo cure y ponía la veladora a la Virgen".
-¿Ella aprendió de quién?
-"Es como un don que ella traía, ella me contó que ella soñaba, incluso donde ella estaba anteriormente y atendía los partos, tenía al Niño Doctor, ella soñaba con ese niño y le decía que curara. Yo le preguntaba y ella me contaba esa historia que ella soñaba o que se le sentaba en su cama y que él decía que curara, que ella traía ese don".
El trabajo de su abuela como partera tradicional, refiere que fue muy conocido, incluso hubo mujeres que llegaban de otros lugares.
A un año de su fallecimiento, comenta que aún hay gente que acude a preguntar por ella requiriendo su trabajo como partera tradicional, oficio que menciona aprendieron su mamá y hermana.
/lmr