Boca del Río | 2022-10-15
Vianey Martínez Gómez, tiene ocho años conduciendo un Mustang y lo que más disfruta es la potencia de su motor, el sonido que se genera al momento de acelerar.
Vianey, de 34 años, destaca de entre todos los participantes por ser de las pocas mujeres que llegaron manejando su vehículo; comparte que su pasión por este modelo viene de familia.
“Hacer todo, pintarlo, interiores, también con los del club me fueron ayudando, ‘mira aquí esta está pieza, aquí puedes conseguir estos rines, puedes comprar estas llantas’ y fue como lo fui formando”.
Vianey Martínez subrayó que la pasión por los Mustang es una forma de vivir, donde todo el tiempo piensa en este coche y trabaja para poder acudir a las concentraciones que se hacen sobre este tipo de vehículo a lo largo del país.
Consideró que la pasión de muchos por este modelo se debe a que es un coche muy poderoso y muy satisfactorio manejarlo en la carretera. Mucha adrenalina.
-¿Qué es lo que más disfrutas de manejar un Mustang?
Para ella, conducir un Mustang es algo sencillo, sin embargo, reconoce que se tiene que tener cuidado al maniobrar este tipo de vehículo.
“Para mí no, se me hace ya sencillo pero si tienes que tener cuidado, porque solo tocas tantito el acelerador y se va, si tienes que estar muy precisa en los movimientos que vas a hacer”.
Comparte que a ella le llevó cuatro años poder aprender a manejar un Mustang, hoy ya ha participado en algunas carreras, rallys, estar en el autódromo de la Ciudad de México.
Incluso ya obtuvo un segundo lugar en una slalom, donde debe exhibir su vehículo realizando ciertas maniobras.
La joven conductora afirmó que cada Mustang refleja la personalidad de su propietario.
“Cada uno le va poniendo un poquito de su persona en su coche, tú te puedes dar cuenta más o menos cómo es una persona, si es ruda, si es tranquila. Yo por ejemplo ahorita traigo este modelo que me lo prestaron, pero el mío es un Mustang convertible 1995 y lo traigo lleno de cristales y brillitos, cada quien va poniendo su estilo”.
Además de requerir sus aceites preferentes, reconoció que el mantenimiento de uno de estos vehículos puede llegar a ser caro debidos a que muchas veces las piezas deben ser importadas.
“Es difícil porque muchas de las partes las tienes que traer de otros países, las tienes que traer de Estados Unidos y así; hay muy pocos aquí por lo mismo, toda la gente quiere tener bien su Mustang y los pocos qué hay los encuentras en deshuesaderos y así”.
Vianey forma parte del Club Mustang Oriente, ubicado en la Ciudad de México, del cual forman parte hombres, mujeres, jóvenes y familias completas, destacó.
Invitó a las personas que tengan un Mustang acercarse a un club, en especial a los jóvenes pues reiteró es una afición que puede ayudar a alejarlos de las adicciones.
“Todos somos hermanos, esta muy padre, que se quieran animar a participar, creo que nos ayuda mucho, a la juventud también los aleja mucho de las drogas, de los vicios porque le metes mucho dinero a tu coche y ya no te queda para nada más”.
Fotos: Iván López.
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