Veracruz | 2024-11-08
El próximo secretario de gobierno, Ricardo Ahued Bardauil, expuso que la rehabilitación de la carretera Puebla-Veracruz, a la altura de las Cumbres de Maltrata, llevará tiempo así como un gran presupuesto, el cual tendría que ser en conjunto con la Federación.
Comentó que ya se están haciendo los estudios adecuados para la reparación de la vía de comunicación, pues se deben de contemplar las normas de seguridad y construcción.
En entrevista a su llegada al Congreso del Estado para presenciar la toma de protesta de los diputados de la LXVII Legislatura, dijo que se tendrán que buscar recursos para la reparación tras el grave talud de tierra que cayó y que dejó atrapadas a varias unidades de transporte de carga.
"Es una obra que se va a llevar muchísimos millones de inversión y que se tiene que hacer con todas las características de norma, de seguridad, es una carretera que se llevará varias semanas o meses para una reparación sería. Ya empezaron a hacer los estudios".
Ahued Bardahuil comentó que una vez que entre en funciones la próxima administración tendrán que buscar los mecanismos y apoyo de la Federación.
El colapso en carreteras de la zona centro está elevando el costo de fletes y el tiempo de traslado también es más, lo que se verá reflejado en el incremento de precios en productos y servicios que deberá pagar el consumidor final, señaló el delegado de la Federación Méxicoamericana de Transporte (Fematrac), Lauro Rincón Hernández.
"El hecho de tener la vía principal de comunicación hacia el centro del país bloqueada como la subida de las Cumbres de Maltrata en la autopista, sí nos está generando un caos que está elevando los costos de operación y de traslado definitivamente", mencionó.
Enfatizó que los tiempos de viaje están aumentando también y obviamente al no poder surtir en tiempo y forma o trasladar y entregar todas las cargas, el riesgo es precisamente que se pueda dar un incremento a todo tipo de mercancías, en este caso los víveres, que son los que se envían vía terrestre.
Reiteró que el impacto es para el consumidor final quien como siempre paga "los platos rotos" de estos problemas.
El transportista declaró que hay mayor gasto de peajes, más tiempo de traslado, cansancio del operador y al final esto genera un impacto negativo.