Tamiahua | 2022-05-30 | José Martín/Imagen del Golfo
Habitantes de la comunidad Palo Blanco tomaron el ayuntamiento para exigir el abasto de agua y que la alcaldesa, Guadalupe Rodríguez los atienda.
Enardecidos, los pobladores bloquearon los accesos de entrada y salida del edificio público en protesta por la falta del vital líquido en sus viviendas.
Los inconformes bloquearon entradas y salidas de Palacio Municipal de Tamiahua y exigieron 'revocar' el mandato de la máxima autoridad municipal por ignorar los problemas de las comunidades.
Habitantes de Palo Blanco aseguraron que la alcaldesa Guadalupe Rodríguez se encuentra al interior de su oficina, pero se niega a atenderlos.
Los habitantes mencionaron que un particular está vendiendo el agua de los pozos artesianos a una empresa privada, situación que ha recrudecido la falta del vital líquido para las familias.
También reprocharon la falta de atención y solución de la presidenta municipal de Tamiahua, a quien señalaron que sólo se la pasa en "fiestas" en vez de gobernar y solucionar los problemas y las necesidades del pueblo.
"La señora anda de fiesta en fiesta, haciendo relaciones públicas, pero la señora no tiene tiempo para atender al pueblo que la puso en esa silla que le queda grande ", consignó una de las mujeres que se sumó a la protesta por el desabasto de agua.
A las consignas, sumaron la solicitud de la revocación de mandato en contra de la presidenta municipal, Guadalupe Rodríguez.
De acuerdo con datos obtenidos, este lunes tenían programado una reunión con autoridades de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para atender el problema, sin embargo, nunca llegaron, situación que inconformó más a los manifestantes.
Los últimos días las protestas en el municipio han arreciado, acusando a la máxima autoridad del municipio de no atender las demandas de la población.
Habitantes de la comunidad de Palo Blanco en el municipio de Tamiahua se manifestaron y bloquearon los caminos vecinales argumentando que una empresa se ha dedicado a sacar agua de una presa, situación que ha comenzado a afectar el suministro de pozos vecinos que abastecen a los pobladores.
Desde la semana pasada, un grupo de personas cerró el paso a las pipas propiedad de una constructora local, ya que cada unidad tiene capacidad de 445 mil litros que diariamente realizan 10 viajes donde acarrean agua con destino desconocido.
Por ello, temen quedarse sin suministro de líquido. Aunque los lugareños solicitaron la intervención de la Alcaldesa del lugar, Guadalupe Rodríguez, hasta el momento no ha atendido la problemática que se enfrenta en este lugar.