Río Coatzacoalcos ¿vivo o muerto?; Séptima parte

Coatzacoalcos | 2023-01-15

Vivencias de mi Puerto México

Nos encontramos en el primer mes de un nuevo año (2023). De nueva cuenta, justo en la ruta orbital de regreso hacia nuestra estrella madre (el Sol).

Astro que los pueblos originarios han considerado su Dios inmediato, desde que la raza humana tiene uso de razón, debido a que es quien provee toda la energía necesaria, para mantener con vida a todo lo existente en nuestro planeta tierra. Renovando así las expectativas de subsistencia de su, cada vez, más complicada carga terrenal.

Por ello es conveniente que quienes tenemos uso de razón, consideremos el beneficio que significa experimentar tal retorno sideral. Asumiendo considerar nuestra responsabilidad como entes racionales. Inmersos en una creciente y cada vez más compleja humanidad.

Problemática poblacional que ha ido agudizándose a partir de la creación de los numerosos núcleos sociales. Quienes han ido diseminándose al ir surcando los continentes de acuerdo a los avances tecnológicos en materia comunicativa terrestre, marina y aeronáutica. Fenómeno social que se incentivó a mediados del siglo XVIII, con el inicio de la revolución industrial.

 


Suceso industrializador que vino a facilitar las actividades, en cuanto a aminorar el esfuerzo manual a través de las maquinas de vapor. Maquinaria que en los siglos XIX y XX fue reemplazada por los grandes avances científicos y tecnológicos que a la vez dieron pie a la construcción de grandes industrias maquiladoras de comestibles, así como de todo tipo de productos y materias primas para tales industrias, que la creciente población demanda.

Tecnologías que han facilitado aún más tal desplazamiento humano. Tumultos sociales que a su vez han estado siendo beneficiados por los grandes avances científicos y por ende tecnológicos en materia médica, que han beneficiado en buena medida la disminución de los decesos por enfermedades y accidentes.

Globalización industrial y explosión demográfica del planeta, que ha acrecentado la contaminación de ríos, mares, atmósfera y espacio circundante terrestre.

Fenómeno contaminante que sin duda también ha incidido en nuestro país México. Principalmente en las grandes ciudades y regiones con población mediana, pero con asentamientos de fábricas, industrias petroquímicas u otras, en su periferia poblacional.

Continuará