Coatzacoacos | 2024-03-10
En días pasados, el árbitro Emilio Valencia fue agredido de un codazo por el "jugador" del equipo Universidad de Sotavento, Rafael García Ocaña, durante un encuentro de playoffs del baloncesto Municipal que se celebraba en la cancha "Maza de Juárez".
Sin embargo, la organización que preside Cupertino Llano aún no ha podido sancionar al agresor, debido a que el silbante, quién sabe por qué, se ha negado a declarar en su contra.
Incluso, de acuerdo a la fuente, Emilio Valencia no se presentó al "careo" con su agresor, por lo que la directiva de dicho circuito investiga por su cuenta, para poder emitir un castigo que de acuerdo al reglamento sería de un año, si no es que más.
ES UNA AGRESIÓN DIRECTA
Tras enterarse de la negativa de su colega, Sabino Tapia consideró que Emilio debería declarar contra su agresor, pues de no hacerlo al rato ese mismo jugador va a golpear a otro silbante y no va a pasar nada.
"No podemos seguir tolerando este tipo de actitudes reprobables en contra de quienes ejercemos esta labor, al contrario, debemos poner un hasta aquí", dijo.
Para Sabino, su compañero de oficio debió reportar al "pseudodeportista", porque se trata de una agresión directa.
"Debe haber un castigo ejemplar, para que otros jugadores lo piensen dos veces antes de arremeter contra un silbante, sobre todo porque la mayoría de ellos juega en las únicas dos ligas que hay aquí (Municipal y La Noria)", comentó.
Sabino, quien cuenta con varios años en el arbitraje, aseguró que si él hubiera sido el agredido, iría hasta las últimas instancias, pues de no actuar puede volverse a repetir.
"A lo mejor a Emilio le dieron dinero para callarlo o hablaron con él, pero yo sí lo hubiera reportado, porque al rato hasta te amenazan de muerte", finalizó.
"No podemos seguir tolerando este tipo de actitudes reprobables en contra de quienes ejercemos esta labor"
Sabino Tapia
Árbitro de basquetbol
La agresión se registró durante un partido de playoffs en la Liga Municipal de Basquetbol