Veracruz | 2022-07-23
Tengo valiosas experiencias de vida que me tocó aprender de políticos, personas adultas mayores, con los que me tocó en suerte haber tratado, desde joven estudiando la secundaria en el Instituto Tecnológico de Veracruz, que era atinadamente dirigido por el distinguido veracruzano, el Ing. Ismael Lagunes Lastra, quien no solo se conformaba con que su institución educativa atendiera la capacitación académica, también procuraba con su sistema de formación disciplinaria cívica y buenas costumbres, la conversión de sus muchachos en mejores personas integradas a la sociedad en su conjunto.
Cuando egresé de la Heroica Escuela Naval y me integré como Oficial de la Armada, me di cuenta de mi equivocación al escoger mi especialidad profesional, ya que quería ser parte de la carrera del mando y no una especialidad auxiliar, con la que sin oportunidades de reglamento no podría llegar a ser Secretario de Marina, que era mi sueño real.
Procuré ser un buen Ingeniero Mecánico Naval y lo logré con hechos y programas en que participé, para después avocarme a buscar otros caminos, participé en el rescate de algunos barcos e instalaciones en que me asignaron y la modificación del primer buque oceanográfico de México y fui responsable técnico en la segunda conversión de un dragaminas de la Segunda Guerra Mundial, siendo Jefe de Máquinas de ambos, busqué la forma de integrarme a la Dirección General de Oceanografía en la Ciudad de México, iniciando así la posibilidad de incursionar en la política del país.
Asimismo busqué la oportunidad de ser candidato a Diputado Federal en la Ll Legislatura, pero estando a punto de lograrlo, me la ganó una política veracruzana que tenía mejores relaciones y experiencias, seguí luchando para lograrlo en la Lll Legislatura, pero también me ganó un militar de alto rango en el ejército, quien logró obtener la Presidencia de la Comisión de Marina de la Cámara de Diputados, pues no había diputado de la Armada de México.
Precisamente al General le tocó entregarme la Comisión de Marina o lo muy poco que había de ella, debido a que no se interpretaba la importancia del Sistema Marítimo y Portuario Nacional, ni su competencia en ello, es de mencionarse que en la Llll Legislatura dos marinos de la Armada de México, logramos llegar a ser diputados y Presidentes de Comisión, el que escribe en Marina y el Almirante Barberena Vega en la de Comunicaciones y Transportes, lo cual fue un logro por única vez registrado en la historia.
Para lograr ser diputado de la Llll Legislatura, después de intentarlo en la LI y Lll, tuve que entender que en la política necesitaba un apoyo y por ello solicité mis vacaciones para dedicarme a tratar de conocer a Don Fidel de Velázquez, lo cual logré y con su apoyo me autorizaron quedar comisionado en la Confederación de Trabajadores de México (C.T.M.) como Asesor de Mares y Puertos, para incorporarme en su representación en la Campaña Presidencial del Lic. Miguel de la Madrid, conociendo en ella al Lic. Carlos Salinas de Gortari, Manuel Camacho Solís, Luis Donaldo Colosio, Francisco Rojas y su hermano, así como otras importantes personalidades.
Con los sabios consejos de Don Fidel Velázquez fui aprendiendo y relacionándome con mis compañeros del IEPES, el Doctor Gómez Pompa, la Dra. Alicia Bárcenas y muchos más, con quienes durante una semana en la Mansión de Galindo proyectamos la Secretaria de Desarrollo Urbano y Ecología, donde fui Secretario Técnico de la Subsecretaria y Coordinador de control de contaminación en mares y costas, para después ser Director de Hidrografía y salir de ahí como candidato a Diputado Federal.
Estando como Diputado Federal, me tocó conocer a Don Fernando Gutiérrez Barrios, que andaba en campaña como candidato a gobernador del Estado de Veracruz, tuve oportunidad de acercarme a él e intervenir en algunas cosas de su interés para mi buena suerte, porque también así aprendí mucho a su lado, por lo que puedo estar muy satisfecho, ya que Don Fernando y Don Fidel Velázquez, considero que fueron los dos personajes que mas supieron de la política nacional en el siglo pasado, tuve en mi aprendizaje a dos maestros políticos de avanzada edad que sin tantos títulos, sí que sabían de la verdadera política.