Veracruz | 2020-05-02 | Francisco J. Ávila Camberos
Para que las cosas funcionen bien en la vida, debe haber equilibrios. Un coche que cuenta con un potente motor, debe tener frenos adecuados para que no choque.
En las grandes empresas también hay equilibrios. Los planes y programas del director general son autorizados previamente por el Consejo de Administración.
En las democracias sucede algo similar. Su estabilidad y permanencia se basa en la división de poderes. (Ejecutivo, Legislativo y Judicial). Cada uno tiene responsabilidades y atribuciones distintas que sirven de contrapesos para evitar abusos, desorden y violación a la Ley.
Para evitar males mayores a la república, quienes redactaron nuestra Constitución establecieron con mucha visión que si el Poder Ejecutivo ejerce el presupuesto, el Poder Legislativo es quien debe aprobar el cómo y en qué se usará el dinero.
En México, ya hemos padecido a Presidentes todopoderosos como Echeverría y López Portillo quienes tuvieron un congreso sumiso que les aprobó todas sus ocurrencias y despilfarros. Conclusión: Por falta de contrapesos manejaron al país a su antojo. La nación sufrió severos descalabros económicos y crisis sociales que provocaron devaluaciones, pérdida de empleos, cierre de empresas y una inflación galopante que causó mucho daño.
Afortunadamente, a finales del siglo pasado el partido del presidente en turno perdió la mayoría en el Congreso, lo que le permitió al Poder Legislativo servir realmente de contrapeso a las decisiones del Ejecutivo y evitarle así males mayores a México.
Sin embargo, en las elecciones del 2018, MORENA y sus aliados arrasaron en las urnas y no solo obtuvieron la Presidencia de la República, sino también la mayoría en ambas Cámaras, lo que anuló los contrapesos reales que tenía el Poder Ejecutivo. Ahora éstos son meramente simbólicos, porque dichas cámaras terminan aprobando casi todo lo que el ejecutivo les envía.
No conforme con esto, el presidente ha mandado una propuesta para modificar la Constitución, de manera que ante una contingencia de salud o económica, pueda él redireccionar el presupuesto del país a su criterio y disponer del recurso para utilizarlo en lo que él estime conveniente, sin la autorización de la Cámara de Diputados.
Esto sería muy grave para México porque de aprobarse pondría la responsabilidad completa de utilizar el dinero público en manos de una sola persona, sin más contrapesos que su propio criterio.
Para ubicarnos es preciso recordar que la misma persona que ahora propone la modificación a la Ley, es quien redujo el presupuesto destinado al sector salud para usar lo recortado en sus proyectos; suprimió el Seguro Popular que sí funcionaba. Lo quitó porque era un programa de Calderón y lo sustituyó por un engendro llamado INSABI que nadie sabe cómo funciona.
Esa misma persona colocó en puestos claves a quienes desconocían el sector salud y dejaron de comprar medicinas e insumos a tiempo. A eso se debe su escasez en los hospitales públicos.
Cuando la salud pública en México es amenazada con la epidemia y para enfrentarla se requieren más recursos, el presidente considera prioritario canalizar dinero para hacer un parque ecológico en Texcoco y un espacio cultural en Los Pinos. Sigue además con su idea de construir el tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía. Esto ni urge, ni es prioritario, sobre todo cuando la salud de los mexicanos está en peligro y se requieren recursos para sortearla crisis económica en que estamos cayendo.
Como podrán ver, es un peligro poner en manos de una sola persona, sin frenos ni contrapesos el manejo del dinero público.
Ojalá y los legisladores tomen conciencia del riesgo que corremos todos con una modificación de ese calibre a la Constitución y voten en contra de esta ocurrencia. Si votan a favor, ya les cobraremos la afrenta en las próximas elecciones.
No les parece a Ustedes?.
Nota de último momento:
Afortunadamente la tarde de ayer viernes la Junta de Coordinación Política determinó que no se instalará la Comisión Permanente que convocaría a un período extraordinario de sesiones, donde se sometería a votación la propuesta del Ejecutivo sobre la Ley del presupuesto. Esta no se reunirá al menos durante las próximas dos semanas, lo que desactiva temporalmente la posibilidad de cambiar la Constitución. Esto se logró gracias a la enorme presión ciudadana que saturó las redes sociales mostrando su rechazo a tal propuesta. Deberemos de continuar al pendiente para que en fecha próxima no resurja semejante ocurrencia.
Muchas gracias y feliz fin de semana.