El valor de una sonrisa

Coatzacoalcos | 2022-09-17

Momento reflexivo


Al abrir nuestros ojos cada mañana podemos contemplar la luz de un nuevo día, el cual Dios nos regala como prueba de su amor. Por tanto, podemos expresar con nuestros labios palabras de agradecimiento y sonreír, y de esa manera mostramos cómo esperamos la nueva oportunidad que Dios nos concede de vivir. Cuando así lo hacemos, estamos condicionando nuestra mente a que éste día sea maravilloso.

Existen personas que desde que abren sus ojos sólo tienen en sus labios quejas. Sus rostros reflejan su malestar. Otras aseguran haberse levantado con el pie izquierdo. Si así lo dicen, así será. El Sabio Salomón en uno de sus proverbios dice: “El corazón alegre, constituye un buen remedio, más el espíritu triste seca los huesos”. El sólo poder abrir los ojos, es ya una bendición. Hay quienes hoy no tuvieron esa dicha. Por eso, abracemos con alegría el nuevo día. En él podremos realizar lo que ayer quedó inconcluso.

¿Por qué una sonrisa es de gran valor? Porque trae alegría, amor y seguridad a nuestra alma. Una persona feliz es aquella que sonríe aun cuando los vientos le sean contrarios. Hay confianza porque se sabe segura tomada de la mano de Dios y que de allí nada ni nadie la moverá. Por eso hay que mirar la vida con fe y esperanza.

Por supuesto que hay momentos en los cuales, aunque se quiera, es muy difícil sonreír. “Todo tiene su tiempo”. Mas cuando apreciamos la vida y nos damos cuenta de lo valioso que es tener un corazón alegre, el rostro denotará lo que hay dentro de nuestro ser. Así hallaremos personas que se sienten felices y otras cuyos rostros reflejan amargura.

Quizá deberíamos recordarnos continuamente que sólo tenemos una vida y que debemos vivirla intensamente y sacándole el mejor provecho. Así, el día que haya que partir lo haremos con dignidad sabiendo que hicimos todo lo posible para disfrutarla y sacar lo mejor de ella.

Mucho se ha hablado de lo que vale un rostro alegre. Aquel que siempre sonríe a pesar de la adversidad. Se ha dicho que la mejor crema antiarrugas es una sonrisa. Hay muchas mujeres y algunos caballeros que viven buscando la fuente de la eterna Juventud y para ello gastan una fortuna. ¡Aprendamos a sonreír! Una sonrisa franca es importante para embellecer cualquier rostro.

Les invito a que observen detenidamente la cara de las personas. Ello les dará una idea de lo que esas personas llevan en su interior. Un rostro alegre siempre llamará la atención. Por el contrario, recordemos el proverbio de Salomón: “Quien tiene un espíritu triste, jamás podrá ser una persona feliz”. La felicidad comienza con fe, lo cual da paz y esperanza, misma que se evidenciará en una bella sonrisa.