Coatzacoalcos, Ver. | 2021-04-21 | Luis Alberto Ponce
Seis integrantes de una familia hondureña que salió de su país luego de ser víctima de pandillas, fueron atendidos y auxiliados por personal del Instituto Nacional de Migración, tras dialogar con ellos en la oficina de representación local del Instituto Nacional de Migración, lugar al que acudieron familiares e integrantes de una asociación civil para apoyarles, ya que entre los integrantes hay una menor de edad en condición especial.
La señora Lucía Amador, residente permanente en México, originaria de Honduras, llegó del estado de Puebla con su esposo Larry Torres para indagar sobre su familia, tras ser informada en torno a su retención.
“Tuvimos que quedarnos en la calle para averiguar y realizar el movimiento necesario ya que si podemos regularizarnos para hacer un trabajo digno sin afectar a nadie”, refirió la señora Amador.
Desesperada pedía ayuda para su familia, siento socorrida por la asociación Movilidad Humana Mercedaria, donde José Luis Reyes Farías, acompañado de Inocente Árias Mariano y José de Jesús Guízar, de agrupaciones religiosas diversas, intervinieron para apoyarle.
En primera instancia, se les informó que enviarían a la familia al estado de Chiapas, lo cual les afectaría ya que tendrían que viajar a ese estado, pero gracias a diversas acciones, se logró que la familia de seis integrantes, fuera liberada en Acayucan y se les proporcionara un salvoconducto para viajar al estado de Puebla,
De esa manera podrán realizar el trámite necesario para iniciar la regularización de su estancia, en compañía de su familiares que ya son residentes permanentes en este país.
AGRADECEN EL APOYO
Con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada por la emoción, Lucía Amador agradecía el apoyo recibido por parte de las autoridades de migración para con su familia, la que prácticamente volvía a nacer, ya que en caso de ser deportados, los esperaría una muerte segura.
“Muchas gracias por todo, por todo, no saben ustedes lo que esto representa, mi familia no podía regresar, ya que están amenazadas al estar invadida su casa por pandillas y más que tienen a la pequeña con en condición especial”, mencionó Lucía Amador.
“Gracias a los hermanos que vinieron, a ustedes que se dieron el tiempo de escuchar nuestras peticiones, al gobierno por su intervención y apoyo, ya que esto es vida para nosotros, para nuestra familia, gracias, gracias de corazón”, dijo doña Lucía.