Guerrero | 2024-09-03
El ingenio y talento de los porteños no tiene límites, y menos si se trata de mejorar la sociedad. En Coatzacoalcos, estudiantes del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Coatzacoalcos (ITESCO) crearon un dron con el que ayudarán a reforestar zonas afectadas por incendios forestales o como en este caso, por fenómenos naturales como huracanes.
Con la temporada de incendios forestales en la que se vieron afectados miles de hectáreas de bosques y valles en el estado de Veracruz, las autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), pusieron en marcha un programa de reforestación a la que se sumaron alumnos del citado centro de estudios.
Ana Paulina Bernal Santos, Adrián Meza Cruz, Erick Toledo López y Kendric Fernando Gallegos Silva, son los brillantes jóvenes inscritos en la carrera de Ingeniería Mecatrónica quienes diseñaron y crearon cinco drones que dispersan semillas por aire, ayudando a tener una reforestación más efectiva en zonas de difícil acceso.
Los estudiantes universitarios, de la mano de sus profesores: Alberto Silva Valenzuela y Luis Alfredo León Valencia, se trasladaron hasta el estado de Guerrero para ayudar a replantar en las zonas que hubo afectaciones luego del paso del huracán Otis, ocurrido el pasado 25 de octubre del 2023.
Por medio de sus cuentas oficiales, el ITESCO dio a conocer la colaboración de la institución junto con autoridades gubernamentales de Acapulco, Guerrero, para la reforestación de reservas ecológicas que fueron destruidas por el vendaval, el cual tocó tierra con categoría cinco en aquella ocasión.
Con el apoyo de los drones se dispersaron semillas encapsuladas con roble rosa, palma redonda, amate blanco, cuahuilote, iguanero, clavelina, huapinol, entre otras, las cuales son flora endémica de la zona.
Fue el pasado jueves, 29 de agosto de 2024, los jóvenes y maestros porteños que encabezan el proyecto de los drones se aglomeraron en el Jardín Botánico de Acapulco ´Esther Pliego de Salinas´, el cual sufrió la pérdida de 387 árboles endémicos tras el paso de Otis, para dispersas lo que llaman "bombas de vida".
Al día siguiente, el pasado 30 de agosto, el equipo de ITESCO siguió efectuando los trabajos de dispersión en el fraccionamiento Las Brisas, el cual también fue una de las áreas devastadas por las potentes rachas de viento del huracán, las cuales llegaron hasta los 330 kilómetros por hora, siendo uno de los más poderosos que han afectando a Acapulco en 100 años.