Coatzacoalcos | 2024-08-28
Un empresario de la construcción que prefirió mantenerse en el anonimato hizo al medio Al Calor Político impactantes declaraciones sobre la ola de delincuencia que actualmente se vive en la zona sur de Veracruz y aquí, en Diario del Istmo, te contamos de qué se trata.
El entrevistado explicó que tuvo que buscar refugio fuera del estado debido a la extorsión por parte de cárteles del crimen organizado, debido a que, en el año 2014, fue secuestrado por un comando armado en el estacionamiento de un centro comercial de Coatzacoalcos, donde se lo llevaron junto con su vehículo y sus documentos.
Durante el plagio fue golpeado, amenazado constantemente con una pistola e incluso señala que fue apuñalado en una pierna para evitar que escapara. Además, para ser liberado tuvo que pagar una gran cantidad de dinero, de la cual prefirió no dar cifras. "Eran 3 personas; se identificaron como parte de un cártel que empezaba a apoderarse de la ciudad", relató.
De acuerdo a sus palabras, al año siguiente, en el 2015, empezaron las extorsiones a las empresas dedicadas a la construcción en esta cabecera municipal, lo que ocasionó la bancarrota de algunas y la salida de otras de la entidad. "El tema es que este cártel se guiaba con un sindicato que es a nivel nacional en México y por ese medio detectaban las obras", expuso, declarando que faltando menos de una semana de que este supuesto sindicato llegara a una obra que se encontraba en curso, empezaron a pedirles cobro de piso.
Narró que empezó a atrasarse con estas cuotas, pero el intermediario le indicó que lo que importaba era que no dejara de pagar y que iban a anotar su deuda. No obstante, un día se presentaron dos individuos en su casa y lo amenazaron con hacerle daño a uno de sus hijos, dándole detalles de sus movimientos. Debido a esto, el empresario preguntó a su contacto qué pasaba y éste le señaló que "no eran ellos".
La fuente anónima detalló: "me generó una gran preocupación al no saber quiénes eran y si tenía que lidiar con otros delincuentes", y fue días después de este incidente que trataron de privar de la libertad a su hijo, quien logró escapar de los criminales y hasta se fracturó una pierna huyendo.
El empresario enfatizó que dejó su vivienda abandonada y malbarató sus pertenencias, vendiéndolas a escondidas, ya que lo único que quería era estar lo más lejos posible de Veracruz.
Para finalizar, mencionó que no duda que haya más historias como la suya, o que incluso hayan terminado mucho peor como en asesinato o desaparición ante los ciudadanos que no lograron pagar el cobro de piso.