Coatzacoalcos | 2021-03-22 | Amayrani Abad
A paso lento, con dificultades para caminar pero con una sonrisa en el rostro y mucha fortaleza espiritual y mental, el pequeño Francisco Samuel Hernández, sale a las calles a vender frituras para costear su rehabilitación.
Acompañado de su madre, la señora Yolanda Hernández Alemán recorren las calles de Coatzacoalcos, para ofrecer sus palomitas y chicharrones y con el recurso obtenido seguir cubriendo los pasajes y rehabilitación en el DIF.
El pequeño Samuel nació a los siete meses, el ser prematuro le provocó parálisis cerebral impidiéndole hablar y moverse.
Actualmente a sus cinco años camina de puntitas con apoyo de una andadera que sostiene con sus pequeñas manos.
Este avance significativo lo ha logrado gracias a sus terapias físicas que toma en el Centro de Rehabilitación e Inclusión social (CRIS) de Coatzacoalcos con un costo de 35 pesos.
“Yo soy diabética y por eso se me adelantó mi parto, gracias a Dios ya ha avanzado él, porque no caminaba, no gateaba no hacía nada y con los ejercicios ya hay una mejoría, su cabecita no la sostenía, sus manos tampoco y ahorita ya ha avanzado con el paso de los años”, expresó Yolanda Hernández.
Samuel tiene ganas de salir adelante, es inteligente y dedicado, pese a su discapacidad trata de realizar actividades como cualquier niño de su edad, estudia el preescolar en línea desde humilde casa.
Yolanda Hernández es madre soltera situación que le hace aún más difícil poder costear las visitas al centro de rehabilitación, pagar consultas y estudios para darle una mejor calidad de vida a su hijo sin embargo, no se ha quedado de brazos cruzados y por ello realizan está vendimia.
“El Dif, nos cobran 35 pesos y la consulta en 200 cuando le tocan cada dos meses o tres, tengo que trabajar así, ando vendiendo ahorita, chicharrones y palomitas, él me acompaña, me ayuda es mi acompañante... todas las tardes salimos a trabajar, lo que junto es para la comida, para la luz el agua porque no tengo otro modo de trabajar”, dijo.
La señora Yolanda requiere comprar un triciclo para facilitar las terapias de Samuel y una tina para bañarse como parte del equipo de rehabilitación, mismas que no ha podido adquirir por falta de dinero.
“Ahorita en el CRIS me están pidiendo un triciclo para que él pueda bajar sus pies porque él camina de punta y a ver si me pueden apoyar con eso”, indicó.
Quienes deseen contribuir con esta causa pueden hacerlo comprando una bolsa de chicharrón o palomitas o en un su caso hacerlo con una donación económica para que pueda seguir su rehabilitación.
Los interesados pueden comunicarse al número 921 103 68 95 a nombre de la señora Yolanda Hernández.