Coatzacoalcos | 2022-06-23
Los eventos temporales que alimentan el flujo informativo tienen fecha de caducidad y son únicos, pero las acciones humanas que originan las noticias son atemporales y cíclicas. Obedecen en realidad a situaciones comunes a la naturaleza humana de los distintos actores involucrados que las tornan repetitivas, haciéndolas predecibles.
A lo largo de 43 años de vida, Diario del Istmo ha registrado esos sucesos puntualmente, como mudo testigo del devenir del tiempo en la zona sur de Veracruz, el país y el mundo, convirtiéndose en un enorme archivo para la memoria de los lectores que no perdonan los olvidos, ni las promesas incumplidas.
Hoy, a casi 5 décadas de un punto de partida, haremos entrega tras entrega, de un recorrido visual por aquellas crónicas y anécdotas que en su momento fueron parteaguas de una sociedad que apostaba por un progreso que llegaría hasta el nuevo milenio.
EN 1980, HACE 42 AÑOS
ASÍ ERA COMO SE VIVÍA
Recorriendo la hemeroteca de Diario del Istmo en el verano de 1980, hace justamente 42 años, podemos descubrir que en un Coatzacoalcos que apenas comenzaba tímidamente su desarrollo que posteriormente lo condujo a convertirse en lo que es actualmente, la vida cotidiana no era tan diferente a esta de la segunda década del Siglo XXI.
TAXISTAS, ETERNO DOLOR DE CABEZA
En la portada del 16 de junio de 1980, apenas en el segundo año del impreso y en el número 419, los usuarios ya se quejaban de los abusos de los taxistas, que al parecer siempre se han comportado igual con sus clientes; únicamente que hace 42 años no existían los teléfonos Android y las miles de aplicaciones que robotizan nuestra vida, y entre ellas naturalmente las de transporte privado como el popular Uber o InDrive que se convirtieron en la competencia de los ruleteros destronándolos de su monopolio.
En otra noticia interesante, podemos leer como se menciona que ‘la venta de 22 mil metros cuadrados impide que la colonia Petrolera se integre al Fundo Legal’ supuestamente para construir una zona comercial impedían que dicho sector habitacional pudiera contar con los servicios públicos indispensables.
Nuestra mente vuela entonces, ¿de qué zona comercial habla la nota, acaso Chedraui I que fue inaugurado apenas un año después, en 1981?
UN REFRESCO DE 1, 500 PESOS
También leemos que un vaso de horchata, agua de tamarindo o limón se vendía en tan solo 10 pesos, lo cual causaba estupor por su alto precio debido al incremento en el costo del azúcar; ahora un refresco vale 15 pesos pero son mil 500 de los antiguos, y esta forma tan escalofriante ha subido la inflación mexicana.
Como si haberle quitado los dos ceros al peso mexicano simplemente hubiese aligerado el terrible problema aritmético que tendríamos ahora. Y pese a ello, aun podemos comprar muchas cosas con dólares, pues vivimos en una especie de ‘ilusión monetaria’.
Es como si tuviéramos una maquinita del tiempo y le hubiéramos quitado la palanca para estacionarla fija, porque observamos en esta portada del 16 de junio de 1980, como hay otra nota expone el problema del transporte urbano en Minatitlán, pero actualmente hace unos cuantos días se exponía en un reportaje de Luis Alberto Ponce, el problema de las rutas urbanas, que ya entonces existía. ¿En verdad hemos avanzado en el tiempo o damos vueltas alrededor de un círculo interminable?
CAMPESINOS CONTINÚAN
EN LIMBO GUBERNAMENTAL
Vemos otra cabeza que alude a un tal Oscar Ramírez Mijares, que averiguando era un Senador por algún estado del norte, pero lo que llama la atención es que se queja de una estructura agropecuaria vigente obsoleta, lo preocupante es que 42 años de distancia, continúa siéndolo.
No se ve por donde el campo mexicano se convierta en uno de los pilares económicos que sostengan a nuestro país, que salvo el aguacate, no presenta otro producto que domine el mercado mundial. Año con año importamos millones de toneladas de maíz de Estados Unidos, a pesar de que esta tierra los aztecas obsequiaron su mayor aportación alimenticia. Huelga decir que el conflicto belico entre Ucrania y Rusia empeoró la importación de trigo y otros granos, disparando los precios de estos insumos básicos en la dieta no solo nacional, sino mundial.
DIPUTADOS INDOLENTES
Agustín Acosta Lagunes fue gobernador de Veracruz de 1980 a 1986, y vemos en una parte de la portada del 16 de junio de 1980, como el primer mandatario del estado ya se quejaba entonces de la lentitud de un diputado local para dar fluidez al aparato legislativo; sí, los diputados siempre han sido los mismos, no importa si hablamos del Siglo XX o del XXI. Al parecer atorar la gestión de leyes, es una constante de nuestros legislativos; hay cosas que nunca cambiarán por lo visto.
EXPLOSIONES EN PAJARITOS
La última nota informativa de esta portada, justo bajo la principal; nos habla sobre ‘más explosiones de 7 plantas de Pajaritos’ y nos quedamos helados rememorando la tragedia del 20 de abril de 2016 en Clorados III del mismo complejo industrial y que costó la vida de 32 trabajadores hiriendo a 130.
Es como si la seguridad en la zona industrial del municipio continuara siendo una asignatura pendiente para los gobiernos municipales que desde 1980, hace 42 años, han decidido el destino de Coatzacoalcos. Por supuesto, que lo mismo podemos decir del gobierno federal, estatal y el propio Pemex. ¿Mala suerte o una precaria estrategia de seguridad industrial? Esa es la interrogante.
¿DÓNDE ESTAMOS,
A DÓNDE VAMOS?
Toparnos de pronto, cara a cara con el ayer puede redefinir nuestro presente y encauzar el mañana donde habremos de descubrir nuevos caminos por recorrer.
Hay experiencias vivenciales que parecen repetirse cíclicamente, peor aún, convertirse en una constante permanente en nuestras vidas; pero no todas son buenas, muchas nos perjudican, merman el entorno social positivo en el cual todos nos deberíamos desenvolver.
Por eso, es imprescindible aprender de los errores del ayer, para estar en condiciones de construir un mejor futuro.