| 2020-09-10 | Alejandro Quijano
El objetivo principal del mindfulness o de la consciencia plena es enseñarles a las personas la forma de darse cuenta en qué tienen puesta su atención, de manera que desarrollen una fuerte conexión mente-cuerpo.
Así, además de conocerse a profundidad, generarán la habilidad de identificar sus propios patrones de pensamiento, incluyendo los dañinos –los cuales son muy comunes. Por medio de la repetición, que es la forma en la que la mente subconsciente adquiere aprendizaje, se van cambiando dichos patrones por unos que sean más constructivos.Todas y todos las tenemos pensamientos negativos y destructivos, y es solo a través de la consciencia plena respecto a su existencia, que podemos aceptar humildemente que nuestra forma de pensar no es la mejor, y que nos trae sufrimiento no solo a nosotros, sino a quienes nos rodean.
Cuando nuestra atención no esta puesta en nuestros pensamientos y acciones, nuestra forma de actuar sale de la programación subconsciente en forma ¨automática¨. Cuando practicamos la consciencia plena es que podemos darnos cuenta de qué es lo que creemos, y cambiarlo en caso de ser necesario. Una vez que le dedicamos un tiempo al reconocimiento de nuestras creencias, es hora de pasar a cambiarlas.
¿Cómo ser mindful?
Esto se logra haciendo un poco todos los días, con hincapié en cuando estamos despertando y cuando estamos por dormirnos porque en ese momento el nivel de actividad consciente es muy bajo, y todo aquello que se diga o se piense, se graba con mayor facilidad en el subconsciente. Lo que se hace es repetir afirmaciones positivas acerca de el nuevo aprendizaje que se quiera integrar.
Hacerlo durante el día –cuando tenemos mayor actividad cerebral– es también muy importante, ya que tener la intención de cambiar alguna creencia, nos vuelve más conscientes de cuando estamos teniendo pensamientos destructivos referentes al área de nuestra vida que queremos mejorar.
Las nuevas creencias se programarán repitiendo constantemente una afirmación positiva que vaya en contra de los pensamientos destructivos. La única regla respecto a las afirmaciones es que jamás deberán incluir la palabra "no", ya que lo que se busca es una apertura total a las oportunidades, no una negación o represión acerca de lo que no queremos. El enfoque debe ser únicamente en aquello que deseamos.
En la medida en la que más atención llevamos a nuestra mente y a nuestro cuerpo, nos volveremos creadores de nuestro mundo interno en lugar de ser meros experimentadores.Ya sea la paciencia, la tolerancia, la empatía, la compasión o la total y completa aceptación, todos tenemos en nuestra mente la capacidad de adquirir nuevos aprendizajes que nos hagan la vida más agradable y armoniosa.