| 2022-12-30
Una de las costumbres más arraigadas que tenemos en diversas regiones del sur de México, en estas fiestas de fin de año es la tradicional quema de muñecos en el medio de la calle, apenas el reloj marca las 12:00, lo que indican que ya estamos en el primero de enero.
Para muchos, esta acción representa dejar todo lo malo en el pasado para que solo cosas buenas y nuevas lleguen a nuestras vidas, con el único deseo de que el próximo año sea mejor que el anterior.
A finales del mes de diciembre se elabora uno o varios muñecos simulando a hombres ´viejos´ con cabello y barba blanca, y vestidos con el atuendo que regularmente se use en la región o cualquier otra ropa. (como paliacates, trajes de manta, sombrero, gorras, botas, etc)
Estos muñecos se rellenan de trapos viejos, periódicos o cualquier cosa que se pueda quemar y por supuesto diversos tipos de pirotecnia, para que, al primer segundo del primero de enero, este se encienda, dándole pauta a los fuegos artificiales que se le hayan metido. Con ello, se despide el año viejo y todos los "males", de tal forma que recibamos el año nuevo renovado.
Ésta además de realizarse en México, también se realiza países de Latinoamérica como:
Según Odi Gonzales, profesor de estudios latinoamericanos y andinos en la Universidad de Nueva York, la quema de viejos comenzó en Ecuador y, como muchas tradiciones en América Latina que se conservan hoy, es producto del mestizaje, la mezcla racial y cultural entre los españoles y los pueblos indígenas.