La crisis financiera de Petróleos Mexicanos (Pemex) ha llevado a distintos sectores de la iniciativa privada a proponer la apertura a la inversión privada como una solución para la estabilización de sus operaciones, así como disminuir su deuda de 20 mil millones de dólares con proveedores.
La presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, dio a conocer que en el presente mes de febrero se impulsarán reformas para permitir la inversión privada en Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) con la finalidad de fortalecer su estabilidad financiera.
De acuerdo con Benito Torres Ramírez, presidente del Clúster de Petróleo y Gas en Tamaulipas (Cepegas), la falta de inversión afecta la producción de hidrocarburos, la cual se ha desplomado a mil 472 millones de barriles al día, el nivel más bajo desde 1975. Asimismo, la crisis también ha repercutido de manera negativa la calidad del crudo, a causa de la falta de los insumos esenciales.
El problema ha generado la paralización de operaciones en Tamaulipas, afectando a empresas y provocando despidos. Torres Ramírez argumentando que la única salida es permitir la entrada de capital privado bajo condiciones claras, además de garantías de recuperación de inversión.
Asimismo, propone que los inversionistas puedan recuperar su inversión por medio de la participación en la producción o comercialización de hidrocarburos, garantizando así un esquema sostenible para atraer capital.
Para finalizar, el titular de Cepegas destacó que Pemex todavía tiene activos valiosos, por lo que considera que es el momento idóneo para permitir la inversión privada antes de que la empresa colapse por completo.
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